¡VERGÜENZAS!
EDITORIAL DE EL DEFENSOR DE GRANADA
Se firmó, al fin, el decreto sobre venta y desarme de 21 titulados
barcos de guerra, que ni eran de guerra, ni barcos siquiera, entre los cuales
figuran recién salidos de los pseudo-arsenales, que no han conseguido navegar…
Añádase a esa lista vergonzosa la de los barcos que quedan casi todos sin
condiciones de combate, según declara el ministro, pero que pueden navegar. Y
agréguese la lista interminable de los que perdimos en Cuba y Filipinas, todos
ellos incapaces de sostener una hora de fuego con verdaderos acorazados y
pregúntense los buenos españoles con que elementos navales fuimos a la guerra
con Estados Unidos. Resulta de los hechos, por una parte, y de las
manifestaciones oficiales, por otra, que fuimos a la guerra con los Estados
Unidos sin contar con un solo barco de verdadera potencia militar ofensiva o defensiva.
¿Por qué fuimos a la guerra? ¿Por qué se engañó a la nación?
¿Por qué se hizo creer que a los españoles que tenían una escuadra y una fuerza
militar en los mares? Ni se han contestado, ni se contestarán jamás esas
preguntas: El silencio es una confesión, y lo que se confiesa es que se engañó
a España. Aún se ha pedido dinero a los contribuyentes en forma ordinaria y
extraordinaria, con el pretexto de adquirir una verdadera fuerza naval y se ha
malversado ese dinero en la adquisición de una escuadra de teatro, que sólo
servía para justificar nóminas de personal, contratas leoninas, facturas
asombrosas y fraudes enormes. Al recordar esa pesadilla de las catástrofes
últimas, evocada por el decreto del Sr. Silvela no nos proponemos lanzar otra lamentación
estéril. ¡¿Para qué?! Tampoco es nuestro ánimo volver al tema ya gastado de las
responsabilidades. ¡Tiempo perdido! Aquí nadie responde de nada. Pero si nos
importa hacer constar que todo, absolutamente todo, continúa en el régimen
imperante de la misma manera que en aquellos tiempos en que se cometieron las
torpezas a crímenes indicados, y que por consecuencia es lógico esperar que
volverá a ser engañado el pueblo español, como lo fue entonces, y por añadidura
timada otra vez ¿Qué nuevas garantías nos da el régimen?
EL "USS MAINE" ENTRANDO EN EL PUERTO DE LA HABANA
25 ENERO 1898
25 ENERO 1898
(Acorazado pre-dreadnought de segunda clase de la Armada de los Estados Unidos)
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