DISCURSO DEL SR. CANALEJAS EN LOS JUEGOS FLORALES CELEBRADOS
EN EL PALACIO DE CARLOS V EL 22 DE JUNIO DE 1900 EN LAS FIESTAS DEL CORPUS.
Fue proclamada Reina la Srta. Clara López Nuño y el poeta
premiado con el primer galardón de los Juegos Florales lo fue el granadino D.
Miguel Gutiérrez Jiménez. El Sr. Gutiérrez se acercó a la Reina de la Fiesta, y
la Srta. López Nuño cortó una preciosa orquídea del tallo en que se erguía y la
entregó al poeta. Este, galante con su graciosa majestad, se la devolvió
entendiendo que estaba mejor sobre su pecho que entre sus propias manos.
EL SR. CANALEJAS
D. JOSÉ CANALEJAS
Al levantarse a hablar el Sr. Canalejas resonaron en el
Palacio grandes salvas de aplausos.
- “Quien
fuera, señora - dice dirigiéndose a la Reina de la Fiesta- bardo legendario u
orador elocuente para poder cantar vuestro reinado, ese reinado que empieza
entre aplausos y entre flores, y que una vez que se concluya, cuando después de
breve rato hayáis descendido de este trono, no se habrá extinguido todavía
vuestra dominación, que concluida aquí seguirá sobre los corazones de los que
somos ahora vuestros súbditos. No os conocía, pero sabía que erais gentil y hermosa,
pues para serlo os basta ser granadina. A esta fiesta de los Juegos Florales,
os acompaña el cariño y el entusiasmo de todos, que todos tenemos a nuestra
Reina de la Fiesta; quien desea, quien la posee; quien la llora. Yo también
bajo mármoles que al tocarlos enfría mis manos y flores que riego con mis
lágrimas, tengo mi Reina de la Fiesta (grandes y prolongados aplausos).
Perdonad que no venga a este acto a contar la luz del edén granadino, el cielo
de Granada siempre hermoso, las hijas encantadoras de vuestra tierra, los
grandes hechos históricos, ni los recuerdos de vuestras leyendas, porque yo soy
aquí un desterrado, soy un hombre político que gobernó cuando todavía no había
llegado para España la hora apocalíptica de sus desventuras, la contemplé
entonces próspera y feliz, y al verla hoy, víctima de todos los infortunios no
puedo por menos de sentir frío en el alma y amarguras infinitas en mi corazón
(Aplausos)
Siempre he conservado vivo el
recuerdo de Granada; allá en los ingratos maniguales de Cuba, cuandocompartía
con los bravos soldados españoles, ya que ni las penalidades ni riesgos
físicos, la fatiga espiritual de la tristeza, al ver como las fatalidades
históricas, hacían temer por los destinos de nuestra Patria, yo me acordaba del
nombre de Granada al pensar en ella, pensaba que si de aquí no zarparon las
naves de Colón, aquí despertaron los alientos de aquella reina excelsa por los
cuales conquistamos un mundo, de donde, si ha desaparecido nuestra dominación
material, hoy domina en él, más que nunca, la grande alma española que vive en
América con su religión, con sus exaltaciones grandiosas de su poesía, con el
idioma armonioso y grande, con la belleza incomparable de las mujeres (Grandes
aplausos)
Así recordaba yo a Granada en Cuba
siendo quizá el último hombre político español que saludó en aquellas ingratas
tierras, la grandiosa bandera de la Patria; que yo creo que como el inspirado
poeta que aquí la ha cantado, que es nuestra madre que siendo Santa se la
venera y siendo culpable se la defiende, patria que al pensar en ella me hacía
volver los ojos a Granada, porque
recordaba que en esta ciudad echaron sus más firmes fundamentos; patria cuyos
infortunios y desventuras pueden ser envidiadas por Dios pero que pueden ser también
originados por ingratitudes y falsías de los hombres que requieren para
rechazarlos, como decía el poeta a que me refiero, la maldición en los labios y
la espada en el puño de todo buen patriota (Aplausos)
En Granada pensaba yo también cuando
a raíz de los últimos meses de este periodo histórico surgía aquel ansia de
regeneración nacional; porque al pensar en Granada recordaba aquella hermosa
armonía entre el trono y el pueblo que hizo grande al pueblo y que la hizo
pasar desde nación informe a nación orgánica, porque toda idea noble, toda idea
grande y patriótica se puede expresar saludando a Granada y recordando su
intervención en la historia de nuestra patria. No pienso continuar diciendo, en
el amor, porque uno que tenía está muerto; no puedo pensar en el arte porque me
falta la inspiración del artista; tengo que pensar solamente como hombre que
vive en la vida pública, en la labor de sacrificio esforzado que se impone a
todos como único medio de conseguir la reconstitución de la patria. Tengo, pues,
que hablar como hombre político, expresando lo que pienso y como lo pienso.
¿Puede creerse que estas fiestas
literarias, que estas justas poéticas representan al contrario a esos grandes
intereses? ¿Son, quizás, vanas frivolidades que a nada práctico pueden conducir
a pesar de que en ellas se abren amplios palenques a la inteligencia y se rinde
culto a la mujer y su hermosura aquí tan gallardamente personificada en la
reina y su corte de amor? No, ciertamente. El arte tiene una gran misión que
cumplir. Los antiguos bardos tejieron con sus canciones y sus rapsodias(*) la
historia de los pueblos. La espada y la lira son hermanas que caminan
estrechamente unidas allanando a los pueblos el camino de la historia, porque
las naciones no viven sólo de la fuerza y no pueden vivir del ideal. Este ideal
no puede dárselo a España actualmente sus homeros políticos pues por desgracia
del principio fundamental de nuestra constitución política que es la soberanía
de la Nación se ha hecho un sistema de farsas y de mentiras; y ese ideal que
hoy día no nos pueden dar los hombre públicos han de tejerlo para España los
poetas y los artistas. Así en esta fiesta solemne el poeta laureado con la flor
natural ha cantado la luz que si es principio de vida en el mundo físico, si es
la esencia del arte, es en la política la verdad y la honradez. Así el poeta
viene a expresar las verdaderas necesidades y los verdaderos anhelos de la
patria; así el poeta precederá al político en esta lucha por el ideal cuya
falta hace que agonice la patria, y así ahora como siempre los artistas y los poetas
serán los grandes precursores. (Grandes aplausos)
Puede quizá equivocarse el artista,
puede equivocarse el poeta en sus exaltaciones pero aun equivocándose sus
cantos y sus obras nos darán alientos y fe para la conquista dl ideal.
Recuerda luego el Sr. Canalejas al insigne poeta Zorrilla
coronado en el Palacio de Carlos V en majestuosa solemnidad literaria, habiendo
tenido aquel insigne poeta la inmensa dicha de no haber presenciado nuestros
cruentos infortunios. Añade que el arte orienta siempre a la política.
- El poeta canta el amor a la patria,
los grandes principios morales y por ellos estas fiestas, en que se rinde culto
a las tradiciones literarias granadinas y no sólo deben ser apreciadas como un
incomparable recreo del espíritu sino como pasos importantísimos en la
reconstitución moral de la patria. Los hombres políticos; a pesar de que la
opinión le es contraria en los momentos actuales, están obligados a remar
siempre adelante sin que se les haga retroceder las censuras; pero el artista y
el poeta necesitan que se les aliente y en forma de aplausos es necesario
darles el estímulo preciso para que nos abran el ideal.
Yo, señores, llego tarde a éstas
solemnidades de Granada; yo soy un hombre de tristezas que ha venido aquí
pensando en las tristezas nacionales, tristezas que deben ser el punto de
contacto de todos nosotros, y en la que es preciso interesar más que a nadie a
la mujer, nuestra compañera y la maestra de nuestra alma; yo concluyo
comparando lo que ocurre a nuestra Nación con lo sucedido recientemente en la
naturaleza por virtud de un fenómeno meteorológico ahora estudiado y comentado
por los sabios. Hubo un instante de reposo, la luz parecía ahuyentada, hubo un
momento en que suspendida toda la vida natural sentimos melancólicas angustias,
más lució nuevamente el sol, alegraron sus esplendores la naturaleza adormecida
y concluyeron las pasajeras tristezas producidas por un momentáneo eclipse. Así
en España si eclipsado el sol de nuestras pasadas glorias, perdida la leyenda
de oro que nos hacía soñar con una patria siempre grande y gloriosa, no hay que
dar abrigo a la desconfianza, no hay que desesperar en el porvenir porque si no
conseguimos para lo futuro grandezas militares con heroicas empresas,
lograremos que luzca el sol del trabajo al amparo de la libertad salvadora; se
desvanecerá la leyenda a que acabo de aludir; pero habremos emprendido con paso
firme el gran camino de la regeneración del mañana (Grandes y prolongadas
salvas de aplausos)
(*)Nota actual: La rapsodia era, en la Antigua Grecia,
el fragmento de un poema épico que un “rapsoda” recitaba, cantaba o declamaba
de manera independiente del resto de la obra. Por ejemplo la declamación de uno
o más cantos (o pasajes sueltos) de los poemas de Homero, la Ilíada y la
Odisea, podían considerarse como rapsodias. “Rapsodia” significa por tanto,
literalmente, “canción ensamblada” o también “partes ensambladas de una canción”.
EL DESFILE
Aún resonaban los aplausos tributados al Sr. Canalejas,
cuando en la misma forma que subieron al trono descendieron de él y volvieron a
atravesar el patio a los acordes de una marcha ejecutada por la banda militar,
la Reina de la Fiesta y su corte, el mantenedor, el Liceo, los poetas, el
Ayuntamiento y las demás autoridades y comisiones. El desfile de la
concurrencia fue brillantísimo y animado. Honor al Liceo y a los organizadores
de esta fiesta culta que ha sido lo mejor de nuestros festejos del Corpus.
LOS MOROS ARGELINOS
Mañana día 24 de Junio de 1900 se verificará por última vez
en el Hipódromo de los Llanos de Armilla la fiesta de correr la pólvora, por
los moros argelinos. A ella ha sido invitado el Excmo. Sr. José Canalejas, en
honor de quien se celebra. Constará el espectáculo de tres números:
El Grum, la Batalla de los Yaffras y los Viek Zelnnan y tres
carreras para caballos y jinetes árabes, adjudicándose un premio al que resulte
vencedor.
Se admitirán apuestas mutuas y el espectáculo empezará a las
4 y media de la tarde. Hay gran animación en el público habiéndose ya vendido
muchas localidades en el despacho situado en el estanco del Zacatín.
IMAGEN DE UNA POSTAL ANTIGUA CON UNA PATRULLA DE
MOROS CORRIENDO LA PÓLVORA
NOTA ACTUAL: Estos “moros argelinos” estuvieron el 22 de Junio visitando
el Albaicín en una excursión que galantemente fue organizada por Afán de Ribera
a quienes posteriormente invitó a merendar café y galletas en su casa (publicado
en el “Defensor de Granada” 23 Junio de 1900)
UN BANQUETE
Esta noche a las 8 se verificará en los salones del Liceo el
banquete con que la culta sociedad obsequia al elocuente mantenedor de los
Juegos Florales.
OTRO BANQUETE
Terminada la solemnidad del Palacio de Carlos V, algunos amigos particulares del Sr. Canalejas
obsequiaron a éste con un banquete que se verificó en los poéticos jardines del
Hotel Siete Suelos. Fue una comida espléndida en la que no faltó un detalle. La
mesa adornada con guirnaldas de olorosos claveles, y fue servida con el buen
gusto que sabe desplegar Emilio Ortiz cuando quiere lucirse.
NOTA ACTUAL: El presidente del Consejo de Ministros y líder del Partido Liberal José Canalejas fue víctima de un atentado en la mañana del 12 de
Noviembre de 1912 mientras miraba los libros expuestos en el escaparate de la
Librería San Martín, en pleno centro de Madrid, cerca de la Puerta del Sol. El
agresor, Manuel Pardiñas, que no figuraba en el
registro policial de los anarquista fichados, le disparó tres tiros por la
espalda. Instantes después fue reducido por un policía a golpes de porra y al
sentirse acorralado se suicidó disparándose dos disparos con la misma pistola
del atentado. Canalejas, entonces Presidente del Gobierno, murió antes de
llegar a la sede del Ministerio de Gobernación donde fue
trasladado.
Francisco Franco publicó bajo el seudónimlo de “Jakim
Boor” el libro “Masonería” donde acusó a la propia masonería de
haber asesinado a José Canalejas, siendo él mismo masón, para vengarse de su rebelión.
De esta forma trágica terminó el segundo intento de “regeneración
desde dentro” del régimen político de la Restauración durante el reinado de
Alfonso XVIII.